"Yo suelo mentir", me dijo
desde sus ojos de vodka con naranja.
"Pero a veces digo la verdad",
y se retorció el pelo.
"¿Serás capaz de aprender a no creerme?",
el humo de su cigarrillo cegó mi boca.
Jamás he vuelto a besar
labios tan sinceros.
A todos los que os encontréis en tierra de nadie, bienvenidos al Área de Descanso.Un lugar ideado para parar, respirar hondo y tomar aliento para proseguir el viaje.Porque la vida sigue, a pesar de todo.
3 comentarios:
(A pesar del tabaco, se podría apostillar).
Entonces ¿hubo aprendizaje o no lo hubo?
No le quite poesía al poema, don Micro. Y disfrute en el Caribe.
Elena, bienvenida al Área de Descanso. A veces preferimos creer mentiras o dejamos que nos mientan. Hay una cosa cierta: hubo beso :)
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