La vida consiste en equivocarse, cada uno a su manera. -Manuel Vicent-

Es preciso tener un caos dentro de sí para dar a luz una estrella fugaz.-Nietzsche-

La vida es una mezcla de aquello que deseamos hacer con ella y aquello que somos capaces de hacer con lo que ella nos trae.-Sergi Bellver-

domingo, 29 de junio de 2008

Verano del 98

Y se sucedían los veranos de oro donde nunca pasaba nada
pero siempre estaba a punto de surgir lo inesperado.

Carmen Martín Gaite. Nubosidad variable.


Lunes 23 de junio de 2008. Tarde calurosa, de verano. Por fin. Ánimo indolente, de televisión y sofá. Se acumula ropa por planchar, relatos por escribir, miles de tareas pendientes. Pero me dejo llevar por la pereza y paso las horas haciendo zapping, viendo programas tontos que no me interesan pero me hipnotizan con la desidia de las tardes de verano. Así, sin querer, sin saber, engancho Pacific Blue en La2 y vuelvo al verano del 98. Policías en bicicleta por las playas de Venice. Una especie de Vigilantes de la Playa de finales de los 90.


Inolvidable verano del 98. Con más trabajo que nunca, estando en el paro. Incongruencia empresarial: me echaron en marzo sin ningún motivo, un día antes de que se cumplieran los tres meses de prueba y luego me contrataron durante todo el verano como free lance porque les faltaba personal. A ellos les salió más caro: me pagaban en negro y yo seguía cobrando paro y haciendo un curso del INEM.


Verano del 98. Verano del amor. De apurar las noches en Madrid hasta el amanecer. De fiestas con vestidos blancos y calambrazos en un pasillo. De tardes de piscina y ver Pacific Blue saboreando un corte de nata. Y de otras muchas cosas que guardo para siempre en la memoria con la etiqueta: “yo lo viví, y fue ese verano”. Un verano que se alargó hasta primeros de octubre. Verano pleno sin salir de Madrid, 24 años, amor y amistad en vena. Felicidad en estado puro siendo consciente de ello. Han pasado diez años y sigo recordando ese verano de manera especial.

Hubo otros veranos antes y algunos después.

Amo los veranos, aunque los últimos quisiera olvidarlos.

Si existe la felicidad, estalla en verano.

Como la tormenta de la noche víspera de San Juan. Relámpagos y truenos, olor a tierra mojada, frescor estival.


Presagio de un buen verano que no ha podido empezar mejor: España ganando partidos de fútbol, compartiendo victorias entre amigos, en uno de los bares míticos de ese verano del 98, viviendo como nunca la Eurocopa, por una vez sueño posible, tal vez cumplido en menos de 24 horas.

Planes en playas del sur, donde gente que quiero y que me quiere me espera.

Verano de oro, que ya toca.

miércoles, 25 de junio de 2008

Poemas de verano I


ATARDECER


Pulpa de sol
escurriéndose
gota a gota
desde el filo de una nube.
Zumo de tarde
que no apaga esta sed de verano,
grito naranja
del día que muere
derritiéndose
en un azul
que no pertenece al mar.

domingo, 22 de junio de 2008

Vila-Matas_El Mal de Montano (fragmentos)



Me digo que hay más conexiones mentales de las que creemos, pero no llegamos a más porque el tejido original parece haberse quedado muy ajado y sólo de vez en cuando algo centellea en él. Vemos casualidades extrañas que tienen seguramente una explicación, que no acertamos a encontrar. Pasamos por la vida sin entender correctamente muchas cosas. “Hay algún malentendido, y ese malentendido será nuestra ruina”, decía Kafka.

***

Me dejo invadir por los recuerdos, los míos y los de otros, y me digo que sin ellos y sin las ruinas de esos recuerdos, sin la memoria, sería aún más angustiosa la vida, aunque tal vez sea aún más angustioso darse cuenta de que cuanto más crece nuestra memoria, más crece nuestra muerte. Porque el hombre no es más que una máquina de recordar y de olvidar que camina hacia la muerte. Y no digo esto con tristeza porque también es cierto que la memoria, disfrazándose de vida, convierte la muerte en algo sutil y tenue.

***

Danzan para mí los recuerdos y me adhiero al tejido imprescindible de mi memoria y de mi identidad (...) y me digo que soy alguien sólo porque recuerdo, es decir, soy porque recuerdo, soy aquel a quien la memoria le ha ayudado siempre evitándole caer en una angustia total, le ha ayudado durante años con sus relámpagos y destellos luminosos en los que, como un rayo de sol, danza para mí cada día, encantador y trágico, el polvo trágico del tiempo.


Enrique Vila-Matas. El Mal de Montano

domingo, 15 de junio de 2008

Versiones de mí


Yo no soy más
que versiones de mí misma
sucesivas
                            simultáneas
                                                            superpuestas.

No existe contradicción
entre dentro y fuera:
el reflejo procede
del mismo interior.

Parezco otra
pero soy la misma.
Soy todas
aunque no me parezca a ninguna.

La máscara se adapta a mí,
no al revés.
Cada gesto es un sentimiento
y todos salen de dentro.
No hay impostura en este espejo.

Soy lo que se ve.
Estoy aquí.

¿Quién se atreve a romper este cristal?


miércoles, 11 de junio de 2008

Inmediateces (X)



Hubo un tiempo en el que me fijaba en las colegialas
y ellas no se fijaban en mí.

Ahora me miran como buscando a un padre.

Yo me vuelvo y miro en la misma dirección,
por si también encuentro uno.


lunes, 9 de junio de 2008

Paisajes


Colecciono paisajes
en los que nunca he estado
amontono postales
de lugares a los que no volveré
planeo viajes
sólo por el placer de regresar

mientras
tú te lamentas
de las pérdidas acumuladas

yo te escucho
intentando adivinar
de qué materia se compone tu tristeza
buscando desentrañar
la naturaleza volátil
que desencadena todas tus ausencias


jueves, 5 de junio de 2008

Artículo en Muchoviaje y las razones para la lectura de Bértolo

Cuento esto porque me hace ilusión. Y porque las cosas buenas si se comparten son aún mejores. Sí, hace ilusión ver publicado un artículo propio. No es el primero, pero emociona igual. Mis primeros pasos. Mis primeras letras negro sobre blanco. En la revista Muchoviaje de este mes, junio. Con foto y todo. Satisfacción y sonrisa para esta semana, en la que el Bremen y su gente sigue dando alegrías. Vamos a más. Y eso es bueno. Muy bueno.

Y como está feo hablar sólo de mi vida, pongamos un poco de literatura de la buena, que estamos en Feria del Libro. Rescato el artículo que escribió Constantino Bértolo publicado el viernes pasado en Público. Una delicia.


RAZONES PARA LA LECTURA


Para ser inteligente, para creerse inteligente, para sentirse inteligente. Para no estar solo, para estar solo, porque más que solo vale estar mal acompañado aunque mucho se diga que no hay libro malo. Porque hace frío ahí fuera, porque llueve sobre el corazón y gusta ver la tinta sobre los campos de nieve. Para ser entre la gente. Para fumar sin sentirse culpable, para dejar de fumar y las manos no se escapen en busca del aire de nadie.


Para tener un libro de bolsillo en el bolsillo y ocuparse de un mientras, un ya veremos y de un entretanto. Por vista, gusto, tacto, olfato y oído y para saber qué alumbra lo que tanto nos gusta. Por ego y por apego. Para esconderse, para mostrarse, para vestirte, para desnudarte. Porque sí, por si, porque no, para no. Para ser feliz, por no ser feliz, por infeliz. Para andar el camino, para encontrar el camino, para olvidar el camino, para construir un camino, para hacer un alto en el camino. Para no perder el tren.


Por sed, por hambre, por tierra, mar y aire. Para mirarse en el espejo, por reflejo incondicionado, para conocer quién nos habla desde el otro lado del espejo. Por ti, por mí y por ella. Porque queremos ver y que nos vean y sin embargo qué morbo da la “cita a ciegas” (el autor pone la alcoba, el editor la casa, el narrador es el que la luz apaga).


Para ver el humo que avisa donde está el fuego. Porque estar cansado tiene plumas, la avaricia comienza en el dar y porque sólo entonces soy como te quiero. Para tener la libertad que no tiene el solitario. Para pedirte perdón por el daño que me hiciste, echar sal en mis heridas e intentar saber cómo me llamo. Porque puedes estar en misa y repicando, nadar y guardar la ropa, ser Caín y el guardián de tu hermano. Porque si no se las lleva el viento, arden las palabras. Por pie quebrado y tan callado. Para conocer la voz de mi amo y para ver si de una vez alcanzo el silencio. Para ser el enfermo y el psiquiatra. Porque yo no soy como te amo.


Porque el poema es una copa de vino, y se fue, y el mañana no ha llegado. Por punto de partida y de hoja en hoja y leo porque me toca. Porque hay vida más allá del punto y aparte y es sano andar a pie de página. Porque si pierdo la memoria qué pereza. Para ni ser ciego en Granada ni nos obliguen a elegir entre la pena y la nada. Para jugar con fuego y no salir quemado. Porque la letra con letra entra, y sale y vuelve a entrar como beso que no quiere que te calles.


Porque entre todos los libros que he leído nunca he leído aquel entre cuyas letras desfallecieron de amor Paolo y Francesca. Para tirar la mano, esconder la piedra y mojar el pan en sangre ajena. Para que me llames y me ames. Para acabar con la propiedad privada de mis palabras. Porque si echas cuentas te sale a cuento y hasta te sobran dos quijotes y medio sancho. Y por los libros de los libros, mal o bien, pero amén.



CONSTANTINO BÉRTOLO. Editor. Director de la editorial Caballo de Troya.




martes, 3 de junio de 2008

Caballos de carretera


Devoro kilómetros
abrasa el horizonte de humo y nubes
paisaje tan lejano que duele
como el mar en los días sin barcos

quemo asfalto con este coche de juguete
que nunca llega a ningún sitio
mis ruedas de cartón
se deshacen al rodar
por un suelo lleno de clavos
falsos y punzantes
como las trampas de la memoria

mil caballos me adelantan
con dientes apretados
y furia en las crines
se ríen con sus bocas inmensas

pienso en los viajes
que perdimos
por los agujeros de la rutina
y los malentendidos

esta carrera no es para mí,
pido el relevo

que se cansen otros,
que yo no quiero llegar a la meta
sólo disfrutar de la ruta
o inventar caminos no marcados

si nos dejan

mientras podamos


lunes, 2 de junio de 2008

Nueva novela de Ray Loriga en octubre

Prometí continuación del post anterior y aquí está.

La alegría de la semana pasada: la noticia de una nueva novela de Ray Loriga. Según leo en la sección de Ricard Ruiz Garzón en El Periódico, se publicará el próximo mes de octubre en Alfaguara y se titulará Ya sólo habla de amor. Al parecer se trata de un monólogo interior sobre las vicisitudes sentimentales de un hombre en crisis tras haber roto con su pareja. Promete y con semejante argumento la especulación está servida. ¿Cómo se llamará la protagonista? Se admiten apuestas.

Tras cuatro años sin novela, los fans de Loriga la esperan como agua de mayo (aunque ya que estamos en junio a ver si el tiempo da una tregua, que se echa de menos el solecito). Yo al menos la aguardo con impaciencia.

De paso Alfaguara reeditará Lo peor de todo y Tokio ya no nos quiere, novela que me enganchó a Loriga y que recomiendo siempre. Y Punto de Lectura publicará en bolsillo Héroes y Caídos del cielo. Se agradece, ya que estos títulos ahora mismo son inencontrables en las librerías.

Seguiremos informando.

Y, ya que estamos hablando de Ray, aprovecho para anunciar que he colgado la última entrega de su relato por partes que sale cada mes en la Revista Man, correspondiente al mes de abril, que se titula Una vida diferente.

[Nota: A los que les interese este relato por partes, están colgadas todas las entregas en mi otro blog, Mundos Propios y extraños, donde en su día también escribí sobre las novelas de Loriga citadas más arriba (aquí).]


***


Anuncié también una película que creo merece la pena recomendar. Se titula Mil años de oración. El director es Wayne Wang y la peli ganó la Concha de Oro en el último festival de San Sebastián. Para quien guste de las emociones lentas y de las que nacen del interior. Para quien guste del cine de miradas, de pocas palabras y de silencios que lo dicen todo pero sin lugar para el aburrimiento. Y con una banda sonora estupenda. Toda la información de la peli y algunas críticas de gente de cuyo criterio suelo fiarme como Carlos Boyero o Ángel S. Harguindey, pinchando en el enlace.


Feliz lunes.